Una inversión de 3,8 M € asegura la garantía de suministro y permite construir una tubería de 1.400 metros, con un depósito de regulación de 5.000 m3. Se considera una acción estratégica que estará lista a finales de este año, al tiempo que se habilitan los accesos a un antiguo polvorín de la red de búnkeres de la guerra civil, que el Ayuntamiento recupera para uso público.
Dentro del Plan de Inversiones que lleva a cabo el Consorcio de Aguas de Tarragona (CAT), la acción más destacable para el actual ejercicio de 2015 es la obra de desdoblamiento de la tubería principal que cruza el Coll de Balaguer, nexo de unión entre las Terres del Ebre y el Camp de Tarragona, mediante un túnel de casi un kilómetro de longitud que está en servicio desde 1989.
Se trata de una inversión crítica para garantizar el suministro en el Camp de Tarragona en caso de una avería grave dentro del túnel, dado que no se dispone de una tubería alternativa y la dificultad que supone una reparación dentro del túnel. De esta manera se podrán emprender trabajos de mantenimiento, en caso necesario, sin verse afectado el servicio ni la calidad del suministro.
El proyecto, que estaba presupuestado en 4,7 M €, se adjudicó en julio de 2014 por 3,8 millones. Las obras se iniciaron en octubre pasado y desde febrero, en que llegaron las tuberías, se emprendieron los trabajos para desplegar los 1.400 metros de tubería de 1.600 mm de polipropileno revestida de hormigón armado.
El desdoblamiento de la tubería comienza justo al inicio de entrada de la conducción en el túnel; se trata de un tramo de unos 300 metros con una pendiente del 40%, por un terreno de piedra, hasta el depósito de regulación con capacidad de almacenamiento de 5.000 m3. Desde este punto se cruza la CN 340, ya fuera del Espacio PEIN, y discurre hasta la EB2, la estación de bombeo y la chimenea de equilibrio del área de Vandellós, visible desde autovía, autopista , carretera y ferrocarril.
El proyecto ha precisado de una planificación cuidadosa, tanto por la complejidad del trazado (se cruza la CN 340, con afectación al tráfico), los accesos y la orografía del terreno, como por lo que una parte del espacio es natural y catalogado como PEIN (La Rajola), lo que conlleva actuaciones especiales y complementarias, así como la restitución final del lugar al terminar las obras que se prevé estén concluidas a finales de este año, cuando pueda entrar el servicio la nueva tubería.
Asimismo, y de acuerdo con el Ayuntamiento de Hospitalet de l’Infant – Vandellós, se aprovecharán los trabajos del CAT para habilitar el acceso a unos búnkeres de la guerra civil española y facilitar su uso cívico, en el marco de recuperación del patrimonio de la memoria histórica. Precisamente en el último ejemplar de la revista «Sàpiens», el trabajo principal de la publicación de divulgación histórica pone de relieve el papel estratégico que tuvo el lugar para evitar el desembarco y ocupación franquista de Cataluña.